La 61ª Edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, la cuarta consecutiva que dirige y gestiona Jesús Cimarro al frente de la empresa Pentación Espectáculos, se clausura con 158.302 asistentes, un 28,30% más que en 2014, lo que demuestra el buen estado de salud de la cita teatral más longeva y prolongada que se celebra en nuestro país.

 

Han sido dos meses – del 1 de julio al 27 de agosto – durante los cuales se han desarrollado actividades y representaciones en tres teatros romanos, en el Museo Nacional de Arte Romano, en distintos espacios al aire libre de la ciudad de Mérida o en la propia sede del festival. A esto hay que sumar la primera extensión del festival extremeño fuera de sus fronteras autonómicas, en los teatros Bellas Artes y La Latina de Madrid, del 18 al 29 de marzo.

 

La programación del espacio principal, el Teatro Romano de Mérida, ha contado con títulos de grandes obras clásicas como Medea, Edipo Rey, Antígona, El cerco de Numancia o La asamblea de las mujeres, batiendo esta última los datos históricos de asistencia a una obra con 30.282 espectadores. A estos espectáculos hay que sumar tres que, respetando la esencia clásica, son de nueva creación, lo que revitaliza el repertorio de espectáculos: Sócrates, César & Cleopatra y Hércules, una coproducción del Festival de Mérida con una compañía extremeña orientada al público familiar, un musical que ha abierto las ventanas para la formación de nuevos y futuros espectadores.

Los espectáculos han sido dirigidos por grandes de la escena: José Carlos Plaza, Mario Gas, Andrés Lima, Alfredo Sanzol, Miguel del Arco, Magüi Mira, Juan Echanove, Ricard Reguant o Paco Carrillo; y han contado con intérpretes de la talla de Ana Belén, Adolfo Fernández, Consuelo Trujillo, José María Pou, Carles Canut, Amparo Pamplona, Aitana Sánchez-Gijón, Juan Antonio Lumbreras, Eva Trancón, Carmen Machi, Manuela Paso, Ángela Molina, Emilio Gutiérrez Caba, Marcial Álvarez, Lucía Jiménez, Pedro Mari Sánchez, Lolita, María Galiana, Pastora Vega, Sergio Pazos, Pablo Abraira, Paco Arrojo, Víctor Ullate, Ana García o Fernando Ramos.

Pero, un año más, los auténticos protagonistas han sido las 158.302 personas que han asistido a alguna de las obras de teatro o actividades que han dado forma a la programación, lo que supone un 28,30% más que en la 60 edición, por la que pasaron 123.382 personas. El Teatro Romano ha recibido la visita de 93.946 espectadores que han disfrutado de la edición más teatral de los últimos años; un 13,7% más que en 2014, cuando acudieron 82.577.

La exposición Lusitania Romana, en el Museo Nacional de Arte Romano, ha sido vista por 38.797 personas; y la de El libro de las máscaras por 518. El espectáculo circense del pasacalles, Nueve musas, ha tenido 9.000 espectadores; y la de la programación Off Agusto en Mérida 2015 la disfrutaron 3.498 personas.

En esta edición hay que volver a resaltar la apuesta de las instituciones extremeñas por la extensión del festival. Se han vuelto a programar los teatros romanos de Medellín, con 2.158 espectadores; y Regina, con  925. Y, por primera vez, el Festival de Mérida ha tenido una extensión fuera de Extremadura, en Madrid, donde 9.100 personas pudieron disfrutar de espectáculos coproducidos por el certamen emeritense.

A todo esto hay que sumar los 2.500 espectadores que disfrutaron de la ceremonia de entrega de la IV Edición de los Premios Ceres de Teatro; y las 360 que asistieron al Ciclo de Conferencias IV Encuentro con los clásicos.

Al incremento del número de espectadores hay que sumar el superávit económico de las previsiones de taquilla que, a falta de hacer el cierre definitivo que se presentará en unas semanas, rondará los 525.000 euros, lo que ha vuelto a superar las expectativas y los objetivos marcados, fijados inicialmente en un millón de euros. En taquilla se ha recaudado 1.924.686, un 7,98% más que en 2014.