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2010, mal año también para los cultivos de regadío en Vegas Altas

CAMPO/EMPRESAS
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parcela de arroz
Los distintos cultivos de regadío, que son los que realmente tienen un peso específico importante dentro de la economía de nuestra comarca, han sufrido durante 2010 numerosos daños producidos por las incesantes lluvias y en muchos casos desbordamientos de ríos, arroyos y desagües, según informa la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Don Benito y Comarca.

Todo esto, ha hecho que los agricultores tengan que llevar a cabo numerosas y fuertes inversiones para reparar los daños por erosión en los terrenos, así como en todo tipo de infraestructuras agrícolas y ganaderas.

Además, cuando se acabaron de realizar todas estas obras de reparación, la campaña y las labores preparatorias ya empezaban con retrasos, que se trasladaron a las fechas de siembra y por lo tanto muchos cultivos quedaron prácticamente fuera de lo que se considera un ciclo de cultivo normal.

 Cuando esto se produce, según informa la asociación, “sacar adelante la cosecha es mucho más costoso que en condiciones normales, ya que la planta es más susceptible a las diversas plagas y enfermedades, y al final todo acaba repercutiendo en la rentabilidad de los distintos cultivos”. Por ello, añade “hemos tenido que hacer más labores preparatorias y más costosas debido al estado del terreno, más tratamientos fitosanitarios de lo normal, más aportes de abonos y no hemos conseguido llegar a la media de rendimientos de un año normal”.

En cuanto al tomate, las producciones medias de tomate por hectárea han bajado entre un 15% y un 20%. Los precios del tomate han sido tan bajos que con estos rendimientos prácticamente no se han cubierto gastos, según los propios agricultores.

El arroz prácticamente ha vuelto a repetir los precios de la campaña 2009, con una merma de producción de entre un 10 y un 15% con respecto a la media de la zona en condiciones normales, por lo que los agricultores consideran que en general la rentabilidad del cultivo ha sido prácticamente inexistente.

El maíz entró en la misma tónica que los cereales de invierno, con producciones normales pero con precios muy bajos durante el periodo en el cual el agricultor ha estado vendiendo su cosecha.

La fruta ha tenido las fluctuaciones propias de su mercado, cuando no ha habido cantidad ha tenido precios considerables, pero “cuando estábamos en plena campaña de recolección los precios han sido muy bajos, un año con producciones bajas y que al tratarse de un producto perecedero, hay que recogerlo en su momento y vender al precio que esté en ese momento”, añade la asociación.

La aceituna, que todavía durante el mes de enero y debido a las lluvias se está recolectando, está teniendo mermas en producción, con menores rendimientos, lo que se traslada a menor precio, aunque cabe destacar que la calidad del aceite obtenido está siendo muy buena.

Para acabar, la Asociación de Agricultores y Ganaderos añade que  “a todo esto hay que sumarle los problemas financieros por los que también atraviesa nuestro sector, ya que el contagio de desconfianza y apatía de otros sectores le ha llegado al nuestro que viene arrastrando años de perdidas”.

Asimismo, “los recortes de las ayudas de esta Política Agraria injusta e incomprensible para la mayoría de los agricultores, la subida de abonos, semillas, fitosanitarios, combustible, la subida de la tarifa eléctrica, el incremento de la tasa de Confederación Hidrográfica del Guadiana y en definitiva la situación general de crisis de nuestro país, está afectando al sector”.

Por todo ello, concluye la asociación recordando que “todos los que vivimos en esta comarca debemos pensar en la importancia que tienen la agricultura y la ganadería en estos difíciles momentos, ya que de estos sectores depende el desarrollo sostenible del medio rural en el que vivimos, que aseguran el asentamiento de las poblaciones rurales y la ordenación de los territorios. La agricultura es una fuente de bondades y beneficios para todos, y ahora más que nunca”.

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