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El equipo de trabajo del Teatro Romano, junto al graderío

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El graderío del teatro romano de Medellín ya puede verse en su totalidad y se erige en uno de los de mejor conservación de la Península Ibérica. Parte de los trabajadores que forman parte ya de este acontecimiento histórico posan en esta foto (más instantáneas y más detalles del teatro en el interior).


Ampliando la noticia que dio NUESTRA COMARCA, la consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Extremadura, Manuela Holgado, realizó el miércoles una visita al yacimiento metellinense, donde mostró cómo ha quedado el graderío y la orchestra y ha exhibido los últimos descubrimientos escultóricos, una esfinge de 83 centímetros de altura trabajada en un bloque de mármol blanco y una mano en idéntico material hallada en la zona de la orchestra.

VÍDEO DE LAS NOVEDADES DEL TEATRO ROMANO

OTRO VÍDEO DE LA ESFINGE Y EL RESTO DEL TEATRO


Según Holgado, con estos hallazgos se ha finalizado el proceso propio de excavación de este teatro y ahora resta la monumentalización y el acondicionamiento para que sea visitable, unas labores para las que la Junta de Extremadura ha previsto una inversión de dos millones de euros en el presente ejercicio de 2010.


algunas vecinas de Medellín
La conclusión de los trabajos de desenterramiento del graderío ha dejado también al descubierto la parte de la orchestra en un gran estado de conservación y un sacrarium en la parte central de la ima cavea. El graderío presenta un diámetro exterior de 61 metros, conserva muros con alzados de hasta 14 metros y mantiene en su posición original casi 800 de los sillares que configuran los cuatro cunei  la orchestra; está dividido en cavea ima y media con nueve gradas respectivamente, separadas por un pasillo o praecinctio.


Las gradas están constituidas por sillares de granito de una anchura media de 75 centímetros de ancho por 82 de fondo y 40 de alto. De la media cavea se han documentado ocho gradas y posiblemente existiese otra más en la parte superior y un pasillo desde el que se accedía al corredor.


Los accesos de la cavea se realizan por nueve tramos de escaleras, de los cuales se conservan ocho, y por un corredor abovedado en la parte superior con entrada desde el exterior, el cual debía funcionar como distribuidor de los espectadores.
De la summa cavea aún no se ha podido comprobar su existencia, y si en algún momento existió debió situarse por encima de la bóveda del corredor, hasta el límite con la ladera, con espacio para tres o cuatro gradas.


los periodistas, ante la esfinge
En la parte inferior se han descubierto la proedria y la orchestra con placas de mármol, un lugar privilegiado donde se ha hallado la esfinge que formaría parte del remate del Balthus que, a modo de pretil, separaría esta zona del resto del graderío.


En este teatro destacan además el frons pulpiti, del que se conservan quince metros de longitud separando el graderío de la escena, la propia escena que tiene 35 metros de largo y 6,67 metros de ancho y de la que se extrajeron en su momento 70 piezas entre basas fustes y capiteles y se ha documentado el hyposcaenium, un espacio bajo la plataforma de la escena, y el podium, que se conserva parcialmente.

El equipo de trabajo del Teatro Romano, junto al graderío