Efectivos de la Guardia Civil de las comandancias de Badajoz y Cáceres han detenido a tres personas como presuntos autores de varias faltas y delitos contra el Patrimonio, perpetrados en las localidades pacenses de Santa Amalia, Valdehornillos, Torrefresneda y en la cacereña de Miajadas.

Según informa la Guardia Civil, desde el pasado mes de mayo, agricultores de los municipios reseñados, ubicados en el límite de provincia de Cáceres y Badajoz, venían sufriendo una serie de faltas o delitos contra el Patrimonio, consistentes principalmente en la sustracción de baterías alojadas en los motores que este gremio usa para el regadío de sus parcelas. Los hechos denunciados eran 21 en total, 19 en Badajoz (dos de ellos delitos contra el patrimonio) y 2 en Cáceres.

Esta cantidad de afectados, unido a la características geográficas del lugar donde se cometían, ya que se trataba de límite de provincia, hizo que la Guardia Civil formara un grupo de trabajo compuesto por miembros del Puesto de Miajadas (Cáceres) y del Puesto de Santa Amalia (Badajoz), quienes comenzaron una serie de investigaciones, con el fin de proceder a la identificación de los posibles autores de los hechos y al esclarecimiento de los mismos.

El “modus operandi” empleado en los hurtos cometidos, así como diversos servicios de identificación de personas y vehículos en las zona, hicieron que la Guardia Civil acotara el círculo de los posibles autores, finalizando con la localización, en una vivienda de la localidad de Miajadas, de cinco baterías, las cuales podían coincidir con las sustraídas a los agricultores.

Una vez, que uno de los afectados reconoce como suya una de estas baterías, agentes del Puesto de Miajadas procedieron el pasado día 7 de agosto, a la identificación y detención de tres personas, de nacionalidad española y conocidos de la zona, como presuntos autores de los delitos de “robo con fuerza en las cosas”, y de varias faltas “Contra el Patrimonio” por hurto.

Los detenidos son J.J.B.C., de 19 años; A.S.G.M., de 22 años, y F.S.R., de 27 años, todos ellos vecinos de diferentes poblaciones de la comarca y que han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Logrosán (Cáceres).